Los centros penitenciaros son establecimientos con características muy especiales. En ellos, la seguridad es siempre una prioridad, por este motivo necesitan soluciones especiales cuando se ven abocados a hacer reformas.
Cuando un centro penitenciario necesita reformar su cocina es imprescindible que encuentre un modo de poder mantener los servicios de comida de sus internos sin que la calidad de esta y la seguridad del establecimiento se vean afectados. Gracias a los módulos de cocina de Kitchening, cualquier centro penitenciario puede afrontar reformas integrales de su cocina. Los módulos se pueden instalar en prácticamente cualquier sitio que disponga de tomas de luz y agua de manera rápida y sencilla. Además, se pueden ensamblar entre sí, para que, si hace falta, se pueden incluir zonas de preparación, lavado, cámaras, etc. y completar así el conjunto con las necesidades precisas de cada centro.
Instalar módulos de cocina es la mejor manera para realizar una reforma sin que la rutina habitual del centro, tanto del personal de cocina como de los mismos internos se vea afectada. Se trata de una mejor opción que contratar un servicio de catering externo para que se ocupe de los servicios de comida, ya que esto supondría dificultades en la gestión de la seguridad y afectaría a la calidad de los platos servidos.